23 de junio de 2008

La teoria de los dos demonios



La Teoria de los dos Demonios supone que durante la última dictadura militar en Argentina (1976-1983) y en algún tiempo anterior a ella, se dio un contexto de violencia generado por dos extremos: la guerrilla (demonio 1) y las Fuerzas Armadas (demonio 2). En este contexto de violencia quedan en el medio, toda la población civil que no forma parte de ninguno de estos grupos y que, pasan a ser víctimas inocentes de los enfrentamientos que se dan entre los dos demonios.
Más o menos así puede explicarse la teoría de los dos demonios que, si bien ya estaba flotando en el pensamiento correctamente político argentino, quedó institucionalizada en 1984 por el escritor Ernesto Sábato. El escritor, prologó el documento Nunca Más sentenciando que “durante la década del 70 la Argentina fue convulsionada por un terror que provenía tanto desde la extrema derecha como de la extrema izquierda”.

Esta teoría les sirvio a los militares y a los ideólogos de derecha, así como a los formadores de opinión que adoraban ubicarse en el medio de todo y jactarse de detentar una falsa objetividad, para justificar el accionar castrense durante la dictadura que, lisa y llanamente, asesinó a 30.000 seres humanos. “Fue una guerra”, dicen convencidos. “Fue una guerra sucia”, aclaran;; En una guerra hay excesos y mueren inocentes. Y encima (de acuerdo con los dos demonios) hubo excesos de los dos lados y murieron inocentes de ambos bandos.El circulo cierra,lo que dicen ellos ahora es piden perdón por los excesos y errores cometidos, reconocemos que nos equivocamos y a reconciliarnos todos para hacer de ésta una Argentina mejor.

El asunto es que no hubo guerra. Hubo un GENOCIDIO. Si el Estado es la institución que posee el monopolio de los medios de coerción, a partir del 24 de marzo de 1976 esos medios fueron utilizados de manera sistemática para identificar, torturar, asesinar y hacer desaparecer a miles de mujeres, hombres y niños. NO HUBO ERRORES NI EXCESOS. Todo fue sistemáticamente planificado y ejecutado. No hay lugar para dos demonios en el infierno. Hoy, esta teoría vuelve a redefinirse. Luego de 20 años de hablar de los dos demonios que asolaron la nación durante la dictadura militar, los ideólogos de derecha, ciertos políticos y los formadores de opinión que dicen estar en el medio de todo y detentar una inexistente objetividad, vuelven al ruedo con sus fetiches demoníacos para justificar el accionar de las “fuerzas del orden” durante la represión de las manifestaciones populares. “Son los violentos de siempre que nada tienen que ver con los que quieren manifestarse en paz”, dicen los “políticamente correctos”. Y argumentan: “algunos efectivos policiales se excedieron y cometieron errores”.
“La historia la escriben los que ganan” sería la respuesta más gráfica del nacimiento de la Teoria de los dos Demonios.
Entonces esta teoria encaja para toda aquella persona que prefiere olvidar antes que averiguar la VERDAD, pero es más que eso, porque averiguar la verdad implica buscar responsables y hacerse cargo como sociedad de que mucho de lo ocurrido no hubiese sido posible sin la ausencia y el silencio de gran parte de la sociedad.









Maricel Bejarano
Estudiante de Historia
U.N.C.